Poda del granado: consejos para hacerla correctamente
Originaria de los países orientales, la planta del granado está muy extendida en las zonas mediterráneas y es especialmente apreciada por sus frutos de color rojo sangre, dulces y jugosos. Además de con fines de producción, el granado también se cultiva con fines ornamentales y, como todas las plantas frutales, necesita podarse. La poda es esencial para que la planta crezca sana y se mantenga lozana. ¿Cómo hacer y cómo podar el granado? Aquí tienes todos los consejos para llevar a cabo una poda del granado correcto.
Cuándo podar la granada
El mejor periodo para podar el granado es al final de la temporada de invierno o en cuanto termina la temporada de cosecha. Hay que distinguir la periodo de poda del granado en función de la finalidad a la que se destine el árbol, es decir, si es para obtener frutos o para utilizarlo sólo con fines ornamentales. He aquí cómo ajustarlo:
Cuándo podar el granado frutal
Para que la planta produzca frutos jugosos, la poda debe realizarse en el periodo de septiembre a octubre.
Cuándo podar el granado en flor
El periodo de poda del granado con fines ornamentales es de febrero a marzo.
La poda puede hacerse de varias formas y también hay que elegir la técnica adecuada en función de si el árbol se va a utilizar para la producción o sólo con fines estéticos. Las herramientas a utilizar también varían en función de la técnica elegida para podar el granado.
Técnicas de poda del granado
La Poda del granado debe hacerse de forma diferente según el uso que se vaya a dar a la planta de granado y su edad. Existen al menos cuatro técnicas diferentes para podar correctamente el granado, a continuación te las explicamos:
Poda de reproducción
La poda de reproducción es la primera poda que se realiza en la planta del granado y es importante llevarla a cabo correctamente porque de ella depende la forma que debe adoptar al crecer. Por tanto, debe mantenerse y cuidarse a lo largo de los años para que la planta esté sana.
En esta poda es necesario elegir el fin para el que se va a utilizar la planta: si decides utilizarla para la producción de fruta, debe tener la forma de un árbol pequeño, mientras que si decides utilizarla como planta ornamental, debe tener la forma de un arbusto.
Modelar la forma de arbusto es sencillo, ya que refleja la conformación natural de la planta. Para hacerlo bien, tienes que elegir 3 ó 4 chupones más vigorosos para dejarlos en la base de la planta y eliminar todos los demás.
En cambio, dar a la planta una forma de arbolito requiere más cuidados y siempre hay que vigilar los chupones, ya que produce muchos. Durante el invierno, hay que procurar eliminar los chupones sobrantes para evitar que el tallo tenga dificultades para crecer. Para ayudar a la planta a crecer recta, es aconsejable apoyarla con un soporte de un metro aproximadamente.
Poda de fructificación
Esta técnica de poda, conocida como poda de producción o fructificación, mantiene bajo control las ramas fructíferas de la planta. Para favorecer una buena cosecha de los frutos, no es necesario hacer nada especialmente extenuante, basta con dirigir las ramas hacia el crecimiento regular correcto, y eliminar las que crecen en direcciones equivocadas. Así se evita que haya poco espacio para que se desarrolle el fruto.
Poda de renovación
La poda de renovación se lleva a cabo cuando la planta no ha recibido cuidados durante mucho tiempo y necesita restablecerse para reiniciar la producción de frutos. Esta técnica consiste en dar forma a la planta, preferiblemente en forma de arbusto, identificar los tallos más vigorosos y eliminar los chupones basales. De este modo, la planta recupera el vigor y vuelve a producir frutos jugosos.
Poda de verano
Esta técnica de poda se llama poda de verano porque se realiza cuando hace calor. La técnica consiste en eliminar las ramas vigorosas que crecen verticalmente, es decir, en la dirección equivocada, porque no son ramas fructíferas. Hay que saber que en el granado las ramas no productivas crecen en el centro, mientras que las fructíferas son las laterales. Por consiguiente, hay que eliminar las ramas centrales, por tanto no fructíferas, para que no estorben a las fructíferas.
Para podar el granado, las herramientas recomendadas para realizar todas las operaciones son: tijeras de podar, sierras de podar y tijeras. Las tijeras de podar de mango largo son una herramienta adecuada para eliminar las ramas más fuertes y difíciles de quitar, una sierra de podar es útil para eliminar las ramas centrales, mientras que las tijeras son buenas para eliminar las ramas más externas. Es esencial que las herramientas estén perfectamente afiladas y cuidadosamente esterilizadas para evitar la infección de la planta de granado o daños debidos a cortes poco claros.
Como ves, siguiendo los consejos anteriores, podar el granado es fácil y puedes elegir entre varias opciones en función de tus necesidades.
F.A.Q
¿Cuál es el mejor momento para podar un granado?
La poda del granado se recomienda durante el final del invierno, antes de que comience el nuevo crecimiento en primavera.
¿Qué herramientas necesito para podar un granado?
Utiliza tijeras de podar afiladas para cortes pequeños y una sierra de poda para las ramas más gruesas.
¿Cómo puedo identificar qué ramas debo podar?
Elimina las ramas muertas, enfermas o dañadas, así como aquellas que se cruzan o crecen hacia dentro, para mejorar la circulación de aire y la exposición solar.
¿Puedo podar un granado para darle forma?
Sí, además de los cortes sanitarios y de mantenimiento, puedes podar ligeramente para darle forma al árbol, pero siempre respetando su crecimiento natural.
¿Qué debo hacer después de podar mi granado?
Desinfecta tus herramientas de poda después de usarlas y considera aplicar pasta cicatrizante en cortes grandes para proteger el árbol de enfermedades.