Cultiva Romero en Macetas: Secretos para un Crecimiento Exuberante

Las plantas aromáticas enriquecen nuestras cocinas con belleza y sabor. Con la llegada del otoño, descubramos el romero en macetas: cómo cultivarlo y cuidarlo mejor.

En este artículo veremos juntos los trucos y pequeños secretos para un romero en maceta exuberante y fragante.

Cultivar romero en macetas

El romero es una planta resistente que se presta bien al cultivo en macetas.

Pertenece a las plantas medicinales aromáticas perennes, lo que significa que incluso con la llegada del otoño puede seguir proporcionándonos las alegrías y sabores de la cocina mediterránea.

La planta del romero se caracteriza por unas raíces fuertes que además crecen en profundidad y en terrenos escarpados, por lo que la maceta es un entorno controlado y facilitado más que adecuado para su cultivo.

Cómo cultivar romero en maceta

En primer lugar, es importante decidir su ubicación. El interior de nuestra cocina es un entorno favorable donde puede beneficiarse de una temperatura controlada.

Recordemos que la exposición al sol es indispensable para su salud y para asegurar su aroma fuerte y hechizante. Por tanto, intentemos exponerla lo más posible a los rayos del sol, manteniéndola cerca de la ventana y sin contacto directo con fuentes de calor.

Puede plantarse por esquejes o cultivarse por siembra; en ambos casos, la mejor época es la primavera, posiblemente en días soleados, cuando se producen las primeras subidas de temperatura.

En el caso de la siembra, basta con esparcir una pizca de semillas en la superficie y luego cubrirlas con un poco de tierra, procurando mantenerla caliente y húmeda durante los primeros 15 días, tras los cuales deberían ser visibles los primeros brotes.

Regar el romero en macetas

Otro aspecto clave para la salud de esta planta aromática es un riego adecuado.

Si en verano hay que regarla a menudo debido a las altas temperaturas, en otoño e invierno para el cuidado correcto del romero en maceta basta con asegurarse de que la tierra permanezca ligeramente húmeda, regando sólo cuando la tierra se seque demasiado.

Una vez que crezca se convertirá en una planta resistente a la sequía, pero en cuanto se plante en una maceta y durante las dos primeras semanas debe regarse con frecuencia.

Ten cuidado, sin embargo, de no excederte, ya que una tierra demasiado húmeda dañará la planta. Durante las primeras semanas puedes confiar en la tierra drenante, añadiendo después tierra más rica por encima.

Recuerda que el romero no te avisa del exceso de agua, así que confía en tu sentido del tacto para comprender el grado adecuado de humedad de la tierra.

Otro consejo es airear la tierra, aflojando la superficie y permitiendo así que el aire y la luz penetren en los primeros centímetros. Al airear la maceta también te librarás de la pequeña vegetación oportunista que podría asfixiar a tu romero.

Abono para el romero en maceta

A diferencia de la planta cultivada en el jardín, el romero en maceta no tendrá raíces especialmente profundas que puedan buscar los nutrientes en profundidad.

Aunque no necesita ningún nutriente especial, recomendamos añadir una pequeña cantidad de abono líquido específico para plantas aromáticas.

Confía en las indicaciones del producto específico y recuerda no excederte.

Cuándo podar el romero en macetas

El mejor momento para podar el romero en macetas es durante la primavera. Esta época del año corresponde al despertar vegetativo de la planta, que así podrá recuperarse rápidamente.

En primavera, el romero empezará a producir flores, que serán útiles para hacer esquejes.

El rebrote también nos ayudará a saber qué ramas han empezado a regenerarse y cuáles se han secado durante el invierno. Por tanto, podaremos las ramas secas y nos limitaremos a acortar, pero no demasiado, las ramas que hayan dado flores.

Recuerda podar las ramas a no menos de 7-8 centímetros y asegurarte de que la rama restante tenga suficientes acículas para no dejar la planta desnuda.

F.A.Q