Cultivar grelos: cómo y cuándo sembrarlos
Para cultivar grelos hay que conocer la variedad que se va a plantar y las características de esta planta. Estas verduras se caracterizan por su sabor típicamente amargo. Las plantas de nabo crecen bien en climas templados, pero también se adaptan al frío. Italia es uno de los pocos países del mundo donde se cultiva esta sabrosa hortaliza.
Se trata de un tipo de verdura con los mismos valores nutricionales que el brécol, por lo que es rica en propiedades beneficiosas para el organismo. Para conocer sus características y saber cómo sembrar y cuidar los grelos, lee nuestro artículo.
Propiedades y usos de los grelos
Los grelos son verduras ricas en nutrientes y de sabor amargo. Estos cultivos, típicos de Apulia y Campania, forman parte de la familia de las Brassicaceae. Esta planta herbácea puede alcanzar alrededor de medio metro de altura, y se caracteriza por sus hojas de color verde claro y sus racimos de flores amarillas.
En cuanto a las propiedades de los grelos, hay que decir que estas verduras son ricas en vitamina C, hierro, folato y potasio. Además, tienen capacidad antiinflamatoria, antioxidante, anticancerígena y combaten eficazmente la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
En la cocina, las hojas y las inflorescencias de los grelos o el brécol rabe se utilizan para preparar platos sabrosos y nutritivos. Para limpiar bien los grelos para utilizarlos en la cocina, basta con retirar las hojas más gruesas del tallo y lavarlas con cuidado.
Hay muchas recetas con grelos, pero se utilizan sobre todo para hacer platos de pasta, risottos, para rellenar tartas saladas o para preparar sopas y guarniciones.
Cómo sembrar grelos
Para entender cómo sembrar grelos, sólo tienes que preparar la tierra y sembrarlos en zonas de clima templado. Los grelos se cultivan principalmente en las regiones meridionales, pero también es posible cultivarlos en el norte con el método adecuado. Hay que decir que las variedades tardías se cultivan en el sur, mientras que las tempranas en las regiones más frías del norte.
Para sembrar grelos basta con tener un huerto, llenar recipientes con tierra y colocar en ellos dos semillas de grelo. A continuación, los alvéolos de grelo creados deben colocarse a la luz del sol y regarse constantemente.
Para cultivar grelos y lograr una buena germinación, hay que disminuir gradualmente la cantidad de agua y, una vez que los brotes alcancen cinco centímetros, retirarlos de los alvéolos.
El cultivo de grelos es un procedimiento sencillo, de hecho una vez que las plántulas han alcanzado los quince centímetros se pueden trasplantar al suelo. Las plántulas de grelos deben colocarse a unos veinte centímetros de distancia entre sí, en lugares soleados y sin encharcamientos.
Cuándo sembrar grelos
Generalmente momento de sembrar grelos es entre marzo y octubre. En las regiones del sur de Italia siembra de grelos se siembran en julio y se cosechan en septiembre. En las regiones más septentrionales, en cambio, se siembran en julio hasta las primeras heladas invernales.
La siembra de estas hortalizas debe hacerse cuando las temperaturas no sean inferiores a diez grados. Este cultivo es un proceso que requiere el cuidado y la atención adecuados. En cuanto a la recolección, el momento ideal es septiembre en el sur, mientras que en las zonas más septentrionales es noviembre.
Cómo cuidar los grelos
Toda planta debe cuidarse de forma adecuada, para su perfecto crecimiento y para prevenir la aparición de enfermedades. Esta hortaliza no requiere ningún cuidado especial y no es necesario ningún tratamiento con pesticidas.
Para cuidar la salud de esta planta, deben eliminarse las diversas malas hierbas que puedan formarse en el suelo. Los plantones deben cosecharse antes de que aparezcan las flores, cortando tanto las hojas como el flor de cada plantón.
Esta hortaliza típicamente invernal debe seguir protegiéndose de las heladas invernales, por lo que conviene elegir variedades tempranas para la siembra. La mejor tierra para cultivar grelos es la baja en nitrógeno, bien aireada y labrada.
Para el bienestar de la planta, es esencial un clima templado, por lo que deben evitarse los meses demasiado cálidos o demasiado fríos para su cultivo. La gestión óptima del suelo, para evitar el encharcamiento, también es esencial para no arruinar las plantas.